Monday, June 09, 2008

De año en año y tiro porque me toca

Hola mundo!!!

Sigo aquí... detrás de la pantallita :)

Hace unas semanas que me mudé a Lisboa. Finalmente, después de un año con la idea metida en la cabeza, aquí estoy.

Soy una persona feliz. Me levanto por las mañanas y veo el río, vivo en una ciudad llena de luz, puedo ir a la playa siempre que quiera, me gusta mi trabajo, me gusta donde vivo... alguien da más?

Esto era :) Quería compartir mi felicidad con el mundo (si todavía queda alguien que venga por aquí). Por aquí los espero si alguien quiere darse un saltito a la ciudad del fado :)

Besos,
Ylenia

Tuesday, July 24, 2007

Tanto tiempo...

... casi un año!

Aquí sigo, viva en el mundo :) La verdad es que no sé qué me llevó hasta esta página hoy, pero es la primera vez que me apetece escribir algunas líneas desde la última vez que le conté al mundo qué hacía por aquellas tierras de la Gran Bretaña...

Ya no estoy allí :) Estoy de vuelta en el país que me vino nacer (aunque no en la tierra que me vio nacer) y llevo un tiempo pensando de qué manera puedo cambiar mi vida, porque a pesar de que no tengo ni problemas ni grandes preocupaciones, hay algo que no me termina de convencer...

Creo que volveré a postear de vez en cuándo... por qué no :)

Tuesday, August 08, 2006

Me había olvidado...

...que el primer día tuve fuerzas para sacar alguna foto, así que aquí las pongo :) Nos hicimos camisetas para ir todos iguales y no perdernos (gracias Emilio).



Monday, August 07, 2006

Ribadesella

Este fin de semana se me ocurrió la feliz idea de irme a Ribadesella a la bajada internacional del río Sella. Digo feliz porque a pesar de que me encanta Asturias y me gusta más una fiesta que (casi) cualquier otra cosa de este mundo, a día de hoy, lunes después de almuerzo, primer día después del fin de semana para notar las secuelas del mismo, me doy cuenta de que: o estoy demasiado vieja para estas cosas o simplemente soy demasiado fina para dormir en el suelo y estar dos días sin ducha.

Cosas que fui a hacer este fin de semana a Ribadesella:
1. Ver a los amigos: cumplido.
2. Irme de fiesta: cumplido con honores.
3. Comer fabada: todavía sigue pendiente. Nadie quiso acompañarme a mi aventura de comer fabada a más de 30 grados.
4. Ver la bajada del río Sella: ¿bajada de qué? ¿pero había río y todo? Si no recuerdo mal estaba tirada en la playa intentando dormir algo más de la media hora que conseguí pegar los ojos la noche anterior.
5. Tomar sidra: pues sí, pues sí... Pero yo creo que soy fan de la sidra "El Gaitero", de esa de la que siempre hay alguna botella en casa por Navidad...

El viernes fue la llegada triunfal a Ribadesella, todo eso después de tener que esperar por los amigos que me fueran a buscar a Santander porque mi avión llegaba allí y me quedé sin transporte para Ribadesella... un fallo mío, tenía que haber pensado que 300.000 mil personas se desplazarían hasta allí durante el fin de semana :) Por supuesto, la caravana de coches para llegar hasta allí era infinita y tardamos horas en pisar en destino, pero en el fondo era divertido, porque estábamos todos frescos como lechugas, el paisaje de la Asturias profunda es muy bonito y la fiesta ya estaba empezando en el coche.

Llegada a Ribadesella: cola de coches, mucha gente, muchas tiendas de campaña, intercambio de palabras poco agradables con un policía que no era más antipático porque es prácticamente imposible, aparcar coche, montar tiendas y... ¡¡¡viva la fiesta!!! Reconozco que el viernes me lo pasé muy bien y lo recordaré como una de las "grandes noites" de mi vida, pero lo que no me habían contado era el estado en que quedaría mi cuerpo después de toda una noche de fiesta y de dormir en una tienda de campaña en la que a las 9 de la mañana se estaba a unos 40 grados...

Sábado: llegamos arrastrándonos a la playa... Ni nos acordamos que en aquel sitio había gente que realmente fue hasta allí para bajar el río. Prefiero no pensar en el estado del agua del mar cuando entré en él, porque la verdad es que agradeceré eternamente el haber tenido el mar para refrescarme. Por ahí estuvimos marmoteando el resto del día, buscando sombras y sitios para sentarnos y esperando el atardecer y la noche, que traerían más fiesta y más gente.

Domingo: me fui a la tienda con intenciones de dormir algo más de 20 minutos para enfrentar el día que tenía por delante. Ingenua de mí :) No me acordaba de que dormía al lado de cientos de tiendas de desconocidos que volvían completamente borrachos a dormir, de gente que pasaba cantando, de perros ladrando, de gente que se caía encima de tu tienda porque no veía nada en la oscuridad de la noche, de gente que se puso a recoger a las 8 de la mañana, de que pasaría de congelarme dentro de la tienda a asarme en cuanto salió el primer rayo de sol... Vamos, este tipo de detalles que no recuerdas cuando piensas en ir a dormir a las 4 de la mañana :))))))

A las 9 decido que tengo medio cuerpo dormido, que necesito una ducha que no me voy a poder dar y que voy a salir de la tienda antes de que me derrita o muera asfixiada por el olor que desprendían mis pantalones después de haber limpiado el suelo de Ribadesella durante dos noches. Consigo salir de la tienda. Bien, primer objetivo cumplido. Recojo lo que alguna vez pude llamar ropa del suelo de la tienda y lo meto en la mochila. Lo de recoger la tienda y sintiéndolo mucho, se lo dejo a otra persona... Me voy a la estación de guaguas. Una hora de retraso después me encuentro de camino a Santander. Una hora de retención después llego a Santander. Tengo hambre y me voy a comer algo. Cojo otra guagua hacia el aeropuerto. Noto que la gente me mira con cara de pena, creo que realmente mi estado da asco... Llego al aeropuerto y me pongo a andar para no quedarme completamente dormida en cualquier lado y perder el avión (lo que me faltaba). Tres horas después sale mi avión. No recuerdo nada, sólo sentarme y despertarme en Londres Stansted con un dolor de cuello espantoso. No sé cómo me dejaron pasar por el control de pasaportes, porque mi cara no se parecía en nada a la de la foto. Una hora de tren desde Londres Stansted hasta el centro de Londres. Ya casi estaba en casa, cada vez más cerca de la ducha, no me lo podía creer... Media hora de metro después consigo llegar a casa: olía bien y tenía las sábanas limpias. Mañana mismo le regalo un ramo de flores a la mujer que se pasa por mi casa a limpiarla porque hay pocas cosas en esta vida que aprecio tanto como la limpieza, sobre todo después del estado en que me encontraba.

Y por fin la ducha. Reconozco que no pensé en la sequía que está pasando este país ahora mismo... Al salir de la ducha no me reconocía, ¡era yo! ¡Otra vez!

Después de la ducha todavía me quedaron fuerzas para poner una lavadora. Los pantalones vaqueros del fin de semana creo que jamás volverán a recuperar el olor a limpio, porque después de un lavado intenso todavía quedan vestigios de lo que había por el suelo de Ribadesella...

Lunes por la mañana: creo que necesito mil horas de sueño más y un masaje intenso por toda la espalda. Me prometo, juro y me vuelvo a jurar que no volveré a hacer esto en mi vida. Yo para la próxima quiero colchón de látex y ducha de agua caliente, si no no me apunto :)))) Hoy está siendo un día duro en el trabajo. Y el miércoles me voy a La Gomera con la familia a ver la tierra que vio crecer a mis padres y no sé si voy a ser capaz de recuperarme para entonces. Y todo por irme de fiesta :)

El año que viene me quiero ir a San Fermín y ya estoy buscando alojamiento por si acaso...

Sunday, July 30, 2006

Llevo semanas intentando sentarme delante del ordenador para poder escribir algo en este blog, pero no se me ocurría nada. Perdí la inspiración y la motivación de contarle al mundo lo que hacía durante un tiempo...

Supongo que hay momentos para todo; se suman segundos con minutos, sin quererlo se hacen horas, cuando te paras a darte cuenta ya se convirtieron en semanas y en un abrir y cerrar de ojos se hicieron meses. Justo en ese momento es cuando piensas en qué te has dedicado todo este tiempo...

Yo lo he dedicado a la gente que quiero y a mí misma. He seguido con mis viajes, pero ahora no para conocer sitios nuevos, sino para reencontrarme con los conocidos, con los lugares que traen recuerdos, con la gente con la que no paro de reír, con el calor, la arena, el asfalto, los amigos, la familia, las clases de salsa, mi cama...

Mi estancia en Londres se prolonga, todavía no sé por cuánto tiempo. Vivo en una casa nueva, más pequeña y mucho más acogedora, pero como me gustaba el barrio sigue estando en la misma calle :) El verano en Londres es el más caluroso que se recuerda en años, así que el abanico se ha convertido en una prolongación de mi mano :) El Hyde Park ya no tiene el césped verde como en primavera, sino un color amarillento, señal inevitable de la sequía que sufre el país.

En realidad he hecho de todo, pero no he hecho de nada :) He conocido mucha gente nueva, recuperé un anillo perdido, cambié las lentillas por las gafas, me he jurado varias veces que nunca volveré a viajar con Iberia y tengo mi ordenador portátil en perfecto estado después de tenerlo en el servicio técnico durante meses :)

Mis clases de chino ya terminaron y empieza el próximo nivel, pero mi vida nómada no me permite apuntarme, con lo que optaré por usar esas horas en seguir aprendiendo a bailar salsa. Quiero aprender a tocar la guitarra y quiero volver a clases de pintura para poder ser capaz de pintar mis propios cuadros y colgarlos por las paredes de mi futura casa.

El mundo sigue loco a nuestro alrededor y no podemos hacer mucho para cambiarlo.

Yo mientras continúo con mi vida...

Monday, June 12, 2006

Saudades em Lisboa

Antes de seguir con mis cuentos nipones (requieren algo más de tiempo y la verdad es que ahora mismo las fiestas y el trabajo lo ocupan casi todo, jejeje) contaré que hace unas semanas estuve en Lisboa para visitar a amigos, más amigos y encontrarme con otros :)

La idea original era irme a un curso de formación de Nortel en la oficina de Lisboa, pero fue cancelado a últimísima hora y, como yo ya estaba en la capital lusa, no me quedó otro remedio que pasar unos días de vacaciones pelas ruas de Lisboa...



Casualmente (ejem), ese fin de semana fue el festival de Rock in Rio (ya que estoy diré que el año que viene se celebrará en Madrid, así que está marcado en el calendario como cita obligada) y nos pasamos por allí el viernes para bailar al ritmo de Shakira y Jamiroquai entre otros... Fue increíble, había una cantidad de gente que no se conseguía ver dónde acababan las cabezas de la multitud, ¡algo así como los carnavales de Tenerife!





Cómo se nota que era primavera y que la gente sale a la calle con miles de colorines :)))



No todo es fiesta en esta vida (ya nos gustaría), así que también hubo tiempo para alguna visitilla por Cascais y Estoril para pasear por la avenida marítima y darse algún que otro chapuzón. ¿Y qué más se puede hacer en Lisboa? Pues una perfecta opción es irse a comer marisco antes de salir de fiesta por el Barrio Alto :)



Al levantarnos al día siguiente y sentir cómo una temperatura de más de 30 grados nos acompañaba, nos fuimos a la playita después de almorzar con parte de la expedición que marchaba para Porto y para Francia.



El agua estaba congelada y no se podía estar en ella más de 2 minutos, pero valió la pena porque dicen que ¡el agua del mar lo cura todo! :))) De vuelta a casa nos pusimos manos a obra en la cocina y nos preparamos un sushi que estaba tan bueno que me resulta difícil hacerme la idea de que lo hicimos nosotros... Ésta claro que Japón huele a arroz (jajajaja) porque al terminar de cocinar la casa entera olía como cualquier calle del centro de Tokyo :) Fue como volver atrás en el tiempo :)

Aquí los dejo con una foto del sushi que nos comimos... mmmmm... Tan fácil es hacerlo que mi próximo objetivo es encontrar una tienda en Londres donde comprar todo el "kit" de preparación para darme un manjar del estilo cualquier otro día...

Friday, May 26, 2006

Japón - Tokyo(I)

Hace más de un mes que fui a Japón y todavía no había contado nada de lo que hice por aquellas tierras. Tengo que decir que aparte de que no he tenido mucho tiempo, me daba un poco de pereza ordenar las más de 400 fotos que saqué y después seleccionar aquéllas que quería compartir. Podría hacerme alguna cuenta en flickr como mucha gente tiene y así ponerlas todas y me ahorraría mucho tiempo, pero no creo que lo haga... las fotos tienen mucho significado para mí y me gusta compartirlas cuando puedo enseñarlas y explicar dónde estaba, lo que hacía y por qué lo hacía. Las fotos son de esas cosas que me acompañan siempre, sin importar el sitio o el momento :)

En fin, a lo que iba :) ¿Cómo definiría Japón? Pues la verdad es que no es nada fácil, supongo que lo mejor es decir que no es comparable a nada que había visto antes, que simplemente todo es diferente y que la mejor manera de entenderlo es desplazarse hasta allí y verlo con nuestros propios ojos. También diré que llevaba tanto tiempo viviendo Japón a través de los ojos de gente que vive allí que las cosas no me sorprendieron tanto como al resto, para ellos todo era nuevo y sin embargo yo esperaba ver todo eso allí. Si no hubiese sido como lo tenía en mi cabeza creo que me hubiese venido muy desilusionada :)



Esta foto que aparece aquí es la primera impresión de lo que será Japón. Nada más salir del aeropuerto y subirnos en el tren que nos llevaría al centro, esto fue lo que encontramos. A los que ya me han visto y me han preguntado, les he dicho que Japón es el sitio donde más extranjera me he sentido (y ya estuve en Rusia) y sin embargo donde más seguridad tenía. La posibilidad de perderse era mínima, porque los japoneses son tan excesivamente amables, que supongo que antes de dejarte sola cogerían un taxi contigo y te llevarían a la puerta del hotel donde te estás quedando.

Después de unas horas (Tokyo es enorme) llegamos al hostal sanos y salvos. Digo hostal porque así es como lo llamaban ellos, pero teníamos de todo: ordenadores portátiles con conexión a internet gratis, sala con sillones de masajes, sala con televisión, sala con reproductores de dvd's, baños calientes al aire libre... Ya podrían copiar los europeos ese concepto de "hostal", ¿no? :)



Como queríamos adaptarnos al nuevo ambiente lo antes posible, nuestra habitación era muy japonesa y dormíamos en el suelo como los locales :) Yo encantada de la vida, porque cuanto más dura la superficie en la que duermo, tanto mejor :)

Aprovechando que aún teníamos algún tiempo antes de irnos a dormir (y olvidando un poco que el jet lag existe y que probablemente lo sufriríamos y mucho) nos fuimos a la calle a ver como era eso de "perderse" por el centro de Tokyo un día cualquiera del año. De ahí nuestras caras de felicidad en la siguiente foto, y eso que llevábamos mil horas sin dormir...



Nos fuimos a Shibuya y me volví con varios intentos frustrados de sacarme una foto con Hachiko... era imposible parar la avalancha de gente que nos pasaba justo en el momento de tirar la foto...



Hasta los japoneses lo saben... ¡todo es amor en esta vida! :)



Así más o menos es Tokyo casi a cualquier hora del día, mucha gente, la mayoría de traje, teléfonos móviles, miles de luces, colores, tecnología, movimiento... Increíble :)

La barrera del idioma no la sientes hasta que realmente te encuentras en la situación en la que te tienes que comunicar con un japonés :) Ejemplo: entramos a un restaurante cualquiera esperando encontrar algo de sushi y resulta que después de más de media hora, la ayuda de un hombre que sabía cuatro palabras de inglés de la mesa de al lado y mucha comunicación por gestos, nos consiguieron traer esto:



O sea: ramen :) Media hora para pedir esto :) Welcome to Japan, jajajajaja :)

(continuará...)